A través del alivio del sufrimiento, el manejo del dolor y la atención de necesidades físicas, psicológicas y espirituales, los cuidados avanzados permiten una experiencia más humana y digna durante etapas críticas de la vida, ofreciendo un enfoque integral que aborda no solo los síntomas físicos, sino también las necesidades emocionales, sociales y espirituales del paciente.
Los cuidados avanzados son fundamentales para garantizar una atención centrada en el paciente y su familia, enfocada en mejorar la calidad de vida y respetar la dignidad humana. Invertir en estos cuidados no solo beneficia al individuo, sino que también tiene un impacto positivo en el sistema de salud y en la sociedad en general.